Fallece Dan Rivera, el “cuidador” de Annabelle y colaborador cercano de Lorraine Warren
El mundo del misterio y lo paranormal está de luto. Dan Rivera, investigador estadounidense reconocido por su trabajo junto a la muñeca Annabelle, murió a los 54 años mientras participaba en una gira denominada Devils on the Run (Demonios en Fuga), en Gettysburg, Pensilvania, el pasado 13 de julio de 2025.
Rivera, conocido como uno de los cuidadores de Annabelle, fue también colaborador de Lorraine Warren, la famosa investigadora en la que se basa la saga cinematográfica El Conjuro. Su fallecimiento fue confirmado por diversos medios estadounidenses como Evening Sun y TODAY.com.
Dan Rivera formó parte de la New England Society For Psychic Research (NESPR), sociedad fundada por Ed y Lorraine Warren, pioneros en la investigación de fenómenos paranormales en Estados Unidos.
Fue asesor de la serie de Netflix 28 Days Haunted y estuvo estrechamente relacionado con el caso de Annabelle, la muñeca supuestamente poseída que inspiró una de las películas más aterradoras del universo de The Conjuring. Aunque la muñeca permanece en el Museo Oculto de los Warren en Monroe, Connecticut, Tony Spera, yerno de los Warren, la llevó en una gira por Estados Unidos donde Dan Rivera participó activamente.
Según informes del Condado de Adams, servicios de emergencia acudieron a un hotel en Gettysburg donde se realizó RCP a un hombre de edad coincidente con la de Rivera. Scott Pennewill, forense adjunto del condado, aseguró que la muerte no fue sospechosa y se espera el resultado de la autopsia en las próximas semanas.
Importante aclaración: la muñeca Annabelle no estaba presente en la habitación donde fue hallado el cuerpo sin vida de Rivera.
En un comunicado oficial, la NESPR expresó su pesar por la pérdida de uno de sus miembros más activos:
Dan realmente creía en compartir sus experiencias y educar a la gente sobre lo paranormal. Su bondad y pasión tocaron a todos los que lo conocían.
También recordaron que Rivera fue un apoyo constante para Lorraine Warren en sus últimos días:
Permaneció a su lado incluso cuando su salud se deterioró, siempre ofreciendo una mano firme y un apoyo inquebrantable.
El equipo también lo describió como un hombre de fe, con una fuerte conexión espiritual en cada investigación, y enfatizó su compromiso con las familias afectadas por fenómenos inexplicables.
Dan Rivera dejó huella como educador, guía y protector de la memoria de los Warren. A través de redes sociales, convenciones y trabajos de campo, se convirtió en una figura respetada en la comunidad de lo sobrenatural.
Dan será extrañado más de lo que las palabras pueden expresar, concluyó la NESPR, afirmando que seguirán con los eventos programados en su honor y en cumplimiento del legado que dejó.